El Pleno del Ayuntamiento de Murcia ha aprobado por unanimidad una declaración institucional que proclama al municipio como "Ciudad Comprometida contra el Acoso Escolar", reafirmando su rechazo absoluto a cualquier manifestación de esta violencia, incluida la que se produce en el entorno digital. El documento defiende la dignidad y los derechos fundamentales de niños, niñas y adolescentes, y subraya la responsabilidad colectiva de protegerlos.
La declaración se presenta en un momento especialmente sensible tras el reciente fallecimiento de Sandra Peña, en Sevilla, un suceso que ha conmocionado a la sociedad y que el Ayuntamiento menciona como recordatorio del profundo impacto del acoso escolar. "Cada víctima es un fracaso colectivo", señala el texto.
Coincidiendo con el Día Internacional contra la Violencia y el Acoso en la Escuela, celebrado el primer jueves de noviembre bajo el lema "Mente digital: aprender a cuidarse en la era tecnológica", el Ayuntamiento destaca la necesidad de reforzar entornos educativos seguros, inclusivos y libres de cualquier forma de violencia. Para ello, reclama la implicación de toda la comunidad: alumnado, familias, docentes, instituciones y ciudadanía. Proteger a los menores, afirma, es una obligación tanto moral como legal.
En este marco, el Ayuntamiento de Murcia se compromete a impulsar diversas actuaciones dentro de sus competencias, entre ellas:
- Promover la colaboración con otras instituciones y organismos públicos en la implementación de programas y actividades de prevención y sensibilización sobre la convivencia escolar.
- Facilitar el acceso y difusión de servicios, recursos y materiales disponibles para el alumnado, que puedan favorecer el bienestar socioemocional del mismo.
- Promover políticas de prevención del acoso escolar y de promoción de la convivencia positiva en otros ámbitos de la sociedad, como el deporte, la cultura y el ocio.
La declaración concluye con un mensaje firme: "tolerancia cero frente al acoso escolar". El acuerdo aprobado establece un único punto: la condena rotunda de cualquier forma de acoso, también en su versión digital, y la proclamación de Murcia como ciudad comprometida con su erradicación.